Tipo de carga y envase a utilizar

El calabacín por su clasificación es de carga general unitarizada, esto quiere decir que se agrupan para facilitar su manipuleo y para mantenerlo seguro. De esta manera se coloca en un contenedor para su transporte internacional. Asimismo, el contenedor para este tipo de carga son los denominados “Reefer”, que son contenedores refrigerados, debido a que los calabacines son de naturaleza perecible, puesto que al ser frutas frescas pueden ser descompuesta fácilmente durante el tiempo de viaje y transcurso del tiempo. Dicho contenedor esta acondicionado con diversos mecanismos que permiten la preservación de la mercancía. 

Los contenedores Reefer son de medida de 20 pies o de 40 pies, se entiende que estos contenedores pueden soportar desde 20 toneladas a 27 toneladas en peso y de 28m³ en volumen y el contenedor Reefer de 40 toneladas tiene un peso máximo de 25 toneladas y de 57m³ de volumen.

Para el envase, se sabe que el calabacín es un producto perecible, por lo que se debe preservar y procurar que llegue en óptimas condiciones. Para mantener dicho producto se utilizará la malla Pronet, la cual brinda protección al producto contra golpes y ralladuras. Adicionalmente, presenta un anillo de seguridad que evita que el producto salga y retarda el proceso de maduración.